TD Bank asume culpa por lavado de dinero y enfrentará una multa de 3,000 millones de dólares
El banco canadiense TD Bank ha decidido aceptar su culpabilidad por infringir las leyes estadounidenses sobre lavado de dinero y se verá obligado a pagar una multa de 3,000 millones de dólares, según informaron las autoridades el jueves. Esta entidad, que tiene su filial en Estados Unidos y ocupa el décimo lugar en cuanto a activos en el país, fue señalada por permitir que delincuentes lavaran varios cientos de millones de dólares.
De acuerdo con el Departamento de Justicia, TD Bank se convierte en el banco más grande en admitir su culpabilidad en un caso de lavado de dinero en territorio estadounidense. Se les acusó de no monitorizar adecuadamente las transacciones hechas entre 2014 y 2023. En una rueda de prensa, el secretario de Justicia, Merrick Garland, mencionó que el grupo se compromete a reestructurar sus procesos de cumplimiento y cumplir con un período de prueba de cinco años. Además, varios empleados del banco enfrentan cargos por haber ayudado, e incluso participado, en el lavado de dinero vinculado al narcotráfico, y dos de ellos ya han sido acusados. "Directivos de alto rango, incluyéndote a quien estaba encargado de la lucha contra el lavado de dinero, estaban al tanto de que había serios problemas en su marco de supervisión, pero el banco nunca intentó solucionarlos", explicó Garland. Se dio el caso de un intermediario ligado a narcotraficantes que, tras ser rechazado por varias instituciones financieras, decidió trabajar exclusivamente con TD Bank, debido a que esta entidad tenía políticas más flexibles en cuanto al lavado de dinero. Bharat Masrani, presidente y director general de TD Bank, pidió disculpas y asumió "toda la responsabilidad" por lo que describe como un "capítulo difícil en la historia de nuestro banco". "Estamos haciendo las inversiones, cambios y mejoras necesarios para cumplir con nuestros compromisos", aseguró en un comunicado. Ya al tanto de la investigación y dispuesto a colaborar con el Departamento de Justicia, TD Bank había apartado 4,200 millones de dólares canadienses, equivalentes a unos 3,000 millones de dólares estadounidenses, para cubrir estas sanciones, de acuerdo con sus informes trimestrales.
Este caso resalta la importancia de que las instituciones financieras tengan sistemas robustos de monitoreo y control para prevenir el lavado de dinero. No solo se trata de cumplir con regulaciones, sino de generar confianza y seguridad en el sistema financiero, vital para el desarrollo económico y la inversión. Las sanciones elevadas pueden impactar significativamente en la reputación y estabilidad de un banco.