El Futuro de las Estrategias Comerciales de Trump es Incierto
Donald Trump, presidente electo de Estados Unidos, no ha solicitado a Robert Lighthizer, el antiguo representante de Comercio, que retome su rol en la agencia encargada de la política comercial en su nueva administración. Esto contrasta con un artículo previo del Financial Times (FT), dijeron dos fuentes al tanto de la situación. Según el FT, se había solicitado a Lighthizer que se encargara de la política comercial de Trump desde la Oficina del Representante de Comercio (USTR, por sus siglas en inglés), citando a personas que prefirieron mantener el anonimato.
Una de estas fuentes, que reservó su identidad, tachó la información de “incorrecta”. Por su parte, Lighthizer no ofreció comentarios sobre este informe ni sobre las discusiones dentro del equipo de transición republicano sobre los posibles integrantes del gabinete. Este abogado comercial con vasta experiencia en Washington apoyó la campaña de Trump para el 2024. Durante el primer período de Trump, Lighthizer jugó un papel clave en la imposición de altos aranceles a productos chinos y en la renegociación del Tratado de Libre Comercio de América del Norte con México y Canadá. En los círculos del partido republicano, se le ha mencionado frecuentemente como un posible candidato para otros cargos en el gabinete, incluyendo el de secretario del Tesoro y el de secretario de Comercio. Hasta el momento, el equipo de transición de Trump no ha respondido a las solicitudes de comentarios. Este jueves, el presidente electo anunció el nombramiento de Susie Wiles, una de sus dos líderes de campaña, como jefa de gabinete en la Casa Blanca. Trump tiene la intención de dar impulso a su agresiva agenda comercial de su primer mandato, que incluye aranceles generales del 10% sobre bienes importados y tarifas aún más altas para las importaciones de China y otros países. De implementarse, estas medidas podrían incrementar los precios al consumidor. El principal representante de China en Estados Unidos advirtió el jueves que no hay ganadores en las guerras comerciales, arancelarias ni en las pugnas por tecnología o industria.
Este escenario refleja la incertidumbre que siempre acompaña las decisiones comerciales en las economías globales. La implementación de aranceles puede generar efectos adversos tanto a corto como a largo plazo, afectando no solo a la economía estadounidense, sino también a sus socios comerciales. Es vital que se busquen enfoques que fomenten una competencia justa sin poner en riesgo la estabilidad del mercado interno y el bienestar de los consumidores.